jueves, 9 de febrero de 2012

¡Esto es la leche!

Hola hola.
Hoy voy a hablar de un tema controvertido. La leche(con perdón).

Es probable que seamos el único animal que una vez destetados seguimos consumiendo leche.El único motivo es el económico, es un buen negocio.
El  motivo para no dejar de tomar leche, en la mayoría de las personas, es el aporte de calcio. Este es el gran argumento esgrimido por los defensores de su consumo.Lo que hay que saber es que para poder asimilar el calcio que tiene, debe estar en una cierta proporción con el  fósforo y el magnesio. Esa proporción es de 2 a 1.(esa proporción se encuentra en las verduras)
Y ¿sabes que en 100 ml de leche hay 120 mg de calcio, 92 mg de fósforo y 12 mg de magnesio?Esta proporción entre el calcio y el magnesio hace que éste se desaproveche precipitándose en forma de fosfato cálcico y eliminándose del cuerpo por las heces.Es decir, que el calcio no se asimila.

Además, la leche es un gran potenciador de alergias, porque la leche tiene una proteína que se llama Caseína  que el hombre no es capaz de asimilar . Esta proteína se pega a la pared intestinal llegándola a atravesarla  a veces.

La lactosa, que es el azúcar de la leche, se acumula en el intestino grueso provocando malas fermentaciones y putrefacción.

La leche animal no solo no calcifica, si no que desmineraliza porque al ingerir proteínas lácticas, provocan acidez transitoria y el organismo entonces reduce sales básicas del hueso porque tiene que regular el PH corporal.

Los japoneses, un pueblo que no consumen leche prácticamente,  es el país con el índice de osteoporosis más bajo.
¿Y cómo ingiero el calcio que necesito?  El calcio es muy abundante en el suelo y las plantas lo asimilan al estar en contacto sus raíces con el suelo. Con un consumo razonable de verduras, leguminosas, ensaladas y fruta, tenemos diariamente ración suficiente de calcio.

La leche es muy dada a producir intolerancias que pasan desapercibidas en muchas personas. Provocan mala digestión y permeabilidad intestinal, causando a la larga alergias, inflamaciones crónicas y debilitando el sistema inmunitario.

Si la consumes con otros alimentos impide que puedas absorber los nutrientes de estos otros alimentos al envolverlos y al pegarse a las paredes intestinales.

Muchas veces vemos que hay niños que tienen muchos cólicos o problemas de oído  y catarros continuos. Esto es problema, en  parte, por el consumo continuado de leche.
Y en las diversas etapas de la vida, como seguimos consumiendo leche, los problemas van variando debido a la intolerancia en menor o mayor grado a los productos lácteos.

Problemas asociados a la intolerancia de la leche según edades:

Bebes:
Cólicos, problemas de oído y catarros.

Niños:
Hiperactividad, terrores nocturnos y asma.

Adolescentes:
Acné, depresión, dolores de cabeza.

Juventud:
Problemas intestinales y menstruación.

Madurez y vejez:
Artritis y osteoporosis.

Las fuentes más sanas, que además contienen otros minerales, que ayudan a fijar el calcio en los huesos son:

    Pescados, frutos secos, algas, verduras de color verde oscuro, aceitunas y huevos.

El consumo de leche está recomendado sólo:

    A    En casos de desnutrición.
    B    En diarreas por gastroenteritis. Nunca si hay estreñimiento.
    C    Después del uso de antibióticos.



Sobre los derivados de la leche:

Yogur

En el yogur, la lactosa se transforma en ácido lácteo (no en su totalidad). Las proteínas son coaguladas y parcialmente digeridas. Este ácido transforma la caseína coagulándola. Y además el calcio del yogur tiene mayor biodisponibilidad, es decir, se aprovecha mejor.  Por estos motivos los yogures  se pueden consumir sin problemas.
Lo mismo ocurre con los quesos

En fin, esto es todo, que no es poco. Espero que os ayuden todos estos datos. Si hay dudas, preguntad.
Y salud!

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